La idea de acabar con una prótesis de cadera asusta a muchos pacientes, sobre todo si son jóvenes o activos. Por eso, cuando escuchan que existe una cirugía menos invasiva, como la artroscopia de cadera en Barcelona, surge la gran pregunta: ¿puede evitar realmente la prótesis?
La respuesta es que, en muchos casos, sí, pero no siempre. Como traumatólogo que realiza este procedimiento de forma habitual, quiero explicarte en qué situaciones la artroscopia puede salvar tu articulación y cuándo, por desgracia, ya no es suficiente.
¿Qué es la artroscopia de cadera y por qué puede evitar una prótesis?
La artroscopia de cadera es una cirugía mínimamente invasiva que permite reparar lesiones dentro de la articulación: labrum roto, choque o pinzamiento femoroacetabular, cuerpos libres, problemas de cartílago… Al tratar estos problemas a tiempo, evitamos que el desgaste avance hasta un punto irreversible (donde la única alternativa de tratamiento es una prótesis de cadera).
El objetivo es preservar la articulación, reduciendo el dolor y manteniendo la movilidad, para que no sea necesario colocar una prótesis.
Casos en los que la artroscopia puede evitar la prótesis
Funciona especialmente bien en pacientes con:
- Lesión de labrum sin artrosis avanzada.
- Pinzamiento femoroacetabular (FAI) diagnosticado precozmente.
- Lesiones de cartílago focales tratables antes de que afecten a toda la superficie articular.
- Dolor persistente que no mejora con fisioterapia, pero con radiografías sin gran desgaste que mantiene un buen espacio articular.
En estas situaciones, la artroscopia en barcelona actúa a tiempo para frenar la progresión del daño y mantener la cadera funcional durante años.
Cuándo es tarde para la artroscopia de cadera
Si la articulación ya presenta una artrosis avanzada o hay una pérdida importante de cartílago, la artroscopia no podrá revertir el daño. En esos casos, lo más eficaz y duradero suele ser la prótesis.
También deja de ser útil cuando el dolor es constante incluso en reposo, la movilidad está muy limitada y las imágenes muestran un espacio articular casi desaparecido.
Cómo saber si eres candidato a artroscopia y no a prótesis
La clave está en una valoración personalizada, con exploración física y pruebas de imagen. Una resonancia y una radiografía bien interpretadas nos permiten determinar si el desgaste es aún reversible.
La edad influye, pero no es lo único: hay pacientes de 60 años con articulaciones bien conservadas que se benefician de la artroscopia con una recuperación temprana, y jóvenes con desgaste avanzado que ya requieren una prótesis de cadera.
Ventajas de la artroscopia frente a la prótesis
- Cirugía mínimamente invasiva, con incisiones pequeñas.
- Recuperación más rápida.
- Conserva tu propia articulación.
- Menor riesgo de complicaciones a largo plazo.
Cuándo es mejor no retrasar la prótesis
Si ya existe artrosis severa, posponer la prótesis intentando otros tratamientos puede prolongar el dolor y empeorar la calidad de vida. En esos casos, la prótesis ofrece resultados muy satisfactorios y duraderos.
La mejor recomendación que te puedo dar hoy…
Un consejo que suelo dar a quienes quieren evitar la prótesis es no ignorar el dolor de cadera persistente. Detectar y tratar lesiones como el pinzamiento o la rotura del labrum de forma precoz multiplica las posibilidades de que la artroscopia sea eficaz y retrase la necesidad de un reemplazo.
Conclusión
La artroscopia de cadera en Barcelona puede ser una gran aliada para evitar una prótesis, siempre que se indique en el momento adecuado y en pacientes con lesiones tratables y sin desgaste avanzado. El tiempo es un factor clave: cuanto antes se actúe, más opciones hay de preservar la articulación.
Si no puedes acudir a mi consulta en Barcelona, podemos hacer una consulta online para valorar tu caso y decidir si tu cadera todavía se puede salvar con una artroscopia.
